Dialogo de los Muertos
Minos: Este bandido de Sostrato sea arrojado al Pyriphlegethòn; este sacrílego sea despedazado por la Quimera; a este tirano, Oh Mercurio, tiéndase al lado de Ticio y que los buitres le desgarren el hígado. Y vosotros los buenos, marchad al punto a los Campos Elíseos y habitad las islas de los bienaventurados, porque habéis practicado la justicia durante vuestra vida.
Sostrato: Oyeme, Oh Minos, sí crees que voy a hablar en razón.
Minos: ¿Otra vez he de oírte? ¿No estás convencido, Sostrato, que eres un malhechor y un asesino?
Sostrato: Estoy convencido, pero considera si en justicia debo ser castigado.
Minos: Absolutamente, si ha de darse a cada cual su merecido
Sostrato: Contéstame, sin embargo, Minos; breve será mi pregunta.
Minos: Habla, y no seas prolijo, que tengo que juzgar también a otros.
Sostrato: ¿Lo qué en vida he hecho, lo hice voluntariamente, o así fué decretado por la Parca?
Minos: La Parca lo decretó, a no dudarlo.
Sostrato: Luego los buenos y lo que a nuestro parecer son malos, no somos más que ministros de ella en todo lo que hacemos.
Minos: Sí; Cloto asigna a cada uno, cuando nace, lo que ha de hacer.
Sostrato: Si un hombre, por consiguiente, se ve obligado por otro a cometer un homicidio , sin poder contradecir a quien le obliga, como un verdugo o un sicario que obedece al Juez o al Tirano ¿A quién le haras reo de esa muerte?
Minos: Claro que al Juez o al Tirano;no en modo alguno a la espada; ésta sirve ciegamente,como instrumento que ejecuta el designio, a quién fué primero la causa de la muerte.
Sostrato: Perfectamente Minos; das mayor fuerza a mi ejemplo. Y si un esclavo por encargo de su señor, lleva a cualquiera oro o plata, ¿A quién han de darse las gracias ó a quién ha de tenerse por bienhechor?
Minos: A quien lo manda, Sostrato; pues el que lo lleva no es más que un mandadero.
Sostrato: ¿Ves por lo tanto, cúan injustamente obras castigándonos, cuando somos simples ejecutores de lo que Cloto nos ordena, ó premiando a aquellos otros que dispensan bienes que les son ajenos? Nadie será, con efecto, que es dado resistirse a lo que se impone con absoluta necesidad.
Minos: Sostrato, otras muchas cosas has de ver que no se hacen conformes a la razón si observas con algún detenimiento. Más el único fruto que sacarás de este asunto es el que te reputemos no solo como bandido, sino también como sofista. Suéltale, sin embargo, Mercurio, y que no se le castigue ya. Pero cuidado con enseñar a los otros muertos a que nos vengan con semejantes preguntas.(Luciano -120 a 180 dc- “Diálogos de los muertos”)
En este breve diálogo, el filósofo se burla del dogma de la fatalidad de los antiguos griegos. Las tres Parcas (Cloto, Artropo y Laquesis) tejían en una rueca el hilo de la vida de los mortales. Minos era uno de los jueces infernales encargado de premiar o castigar y Mercurio era quien los llevaba ante el severo magistrado.
Posdata: Hace varios dias que no puedo ingresar a realizar comentarios por un error en la antena de trasmision de mi conexion de internet; que me arroja un error de "timeout" por ello les ruego paciencia ya que estoy casi virtualmente imposibilitado de escribirles. En breve se solucionara (espero)
0 Comentarios:
Publicar un comentario
Suscribirse a Comentarios de la entrada [Atom]
<< Página Principal