jueves, abril 28, 2005

La Armada Zim y los Rumpelstinskys

Mis reflexiones van a versar sobre el tiempo

¿Qué es el tiempo? Si el tiempo encuentra su sentido

en la eternidad, entonces habrá que comprenderlo a partir

de esta” Martín Heidegger, 1924


Si la Conjura del Club de los Payasos y sus sicarios Los Enanos no ha triunfado, pese a los fuertes embates que han descargado sobre la humanidad, es en parte por obra y acción de la Armada Zim y los Rumpelstinkys. La Armada Zim en una sociedad secreta creada en la noche de los tiempos, algunos citan a Hesíodo como uno de sus iniciadores, otros creen que no es así, pero las palabras de La Teogonía parecen desmentir a quienes lo afirman. Como sabe cualquier parroquiano de La Recova (el café predilecto de la Armada Zim en General Belgrano) Hesíodo fue el creador de la etica basada en la Justicia, el Trabajo y la Paz en el siglo VIII antes de Cristo. Las alteraciones al orden divino eran causadas por la desmesura y destrucción del “arete” griego, conjunto de virtudes que al decir del poeta y apoyando su ideal menciono una tarde de agosto en el ágora: "Grecia ha sido siempre un país pobre pero en ello funda su areté". Obviamente esta concepción del pathos no es compartida por los peronistas y radicales parroquianos del café, que se sienten mas inclinados al areté homérico, distante del anterior por cuanto preconiza la épica y la Heroicidad como valores supremos. Pero salvo esta digresión secreta e intima, todos beben café y eventualmente un whisky nacional de marca innominable sin que al hacerlo se invocaran a las potencias infernales en vivo y en directo. Por razones mas que obvias, los integrantes de la Armada Zim cuando discuten sobre estos temas no aclaran el porque1. Todos creen que es una inocente y política discusión de café, cuando en realidad se esta hablando del destino mismo del mundo... ¿Y entonces por qué causa los Zim hacen esta especie de terapia? Porque precisamente es su única y reveladora terapia. No nos olvidemos que los integrantes de la negra armada (otro de sus nombres secretos heredados de la masonería del siglo XVIII) son los creadores y propulsores de la Gestalt, único medio conocido para evitar la plaga maléfica de los enanos y los payasos.


Los orígenes aparentes datan desde 1879 cuando se creo el Gabinete de Psicología Experimental en Leipzig, desde donde paso a paso y con mas precauciones que las de los freudianos, fueron creando y guiando las peripecias de la psiquis hasta “fundar” oficialmente en 1912 la Gestalt. La necesidad de la cara visible del tempano fue debida a la imposibilidad de mantener el absoluto secreto de la operación. La poca historia que ha trascendido en los Archivos Masurianos (antes llamados Archivos Sérvulus, por San Sérvulo, en Roma, de quien escribe San Gregorio que desde su niñez hasta que expiró vivió paralítico tendido en un pórtico junto a la Iglesia de San Clemente: y cuando llegó su fin, llamándole los Ángeles con cánticos, pasó a la gloria del paraíso. Son muy frecuentes los milagros que obra el Señor en el sepulcro de este Santo, pero fundamentalmente porque a pesar de su inocente milagro fue quien inicio la recopilación de los secretos de esta sociedad destinada a oponerse a los Enanos y posteriormente a los Payasos. San Sérvulo, asegura el Santoral Católico, es buen intercesor ante los casos de parálisis. Se conmemora, curiosamente, en la misma fecha en que la Batalla de los Lagos Masurianos torció los destinos de la Hermandad de la Enana Blanca cuando infiltrados en el alto mando ruso imperial, movieron 250.000 hombres hacia su muerte, pocos días después de la derrota de Tannenberg, también a manos de los alemanes, quienes obviamente eran guiados por la Armada Zim a través de Ludendorf2, quien al cabo de pocos años, traicionado por Hitler se dio por vencido y dejó morir su secreto con él3 , secreto que de haber caído en las manos de este demiurgo del mal, hubiera cambiado la faz de la tierra.)

Estos archivos en folios antiquísimos pertenecieron a la biblioteca secreta del Vaticano, y que por error o senilidad de su anciano bibliotecario vio la luz en 1868, el Padre Benitus Dalla Scombra (y obligo al “descubrimiento” en forma del gabinete de psicología experimental de Wundt en Leipzig) develo parte del misterio. Desde 1895, a la muerte del anciano en circunstancias enigmáticas (falleció de neumonía en pleno verano romano) pasaron a la sección publica hasta 1923 cuando el Papa Pio XI ordenó explícitamente su retiro. Desde esa época un cofre de madera sin mayores adornos ni indicaciones, ha pasado de pontífice en pontífice. Solían guardarlo debajo de la cama del Santo Padre (Pio XII, Juan XXIII, Pablo VI) cuando en 1962 sin que se sepa la razón termino amontonado en un viejo local comercial desocupado en la Avenida San Martín, en General Belgrano, lugar en donde un ex político guarda sus muebles viejos, herencia familiar de larga data. Solo tienen acceso a este arcón, una docena de miembros de la Armada Zim por medios que inclusive el dueño del local ignora, tanto como que posee en custodia este material inédito. Se podrá argumentar sobre la escasa seguridad de arrumbar este objeto precioso en medio de la nada, pues hasta ahora ha sido el más seguro escondite existente, más aún que las bodegas del Titanic en donde por una providencial demora llego tarde, aunque no tanto como para que los Payasos condenaran al navío a la mas helada de las muertes.

La Armada Zim se vinculo con el Vaticano desde aproximadamente el año 1000, desde la epoca del Papa Silvestre II mas conocido como Gerberto de Aurillac, pero su presencia se hizo mas fuerte cuando se fundo La Sagrada Congregación para la Doctrina de la Fe, originalmente llamada Sagrada Congregación de la Romana y Universal Inquisición o también Santo Oficio. Esta fue fundada por Pablo III en 1542 con la bula "Licet ab initio", para defender a la Iglesia de las herejías. En 1908, el Papa San Pío X cambió su nombre por el de Sagrada Congregación del Santo Oficio. Finalmente, en 1965, recibió el nombre actual bajo el Pontificado de Pablo VI. A través del filtro de la fe, continuamente rastreaban la cristiandad en busca de las acechanzas de los Enanos, quienes habían asesinado al menos dos o tres docenas de Papas y varios reyes feudales y alguno imperial en la tumultuosa edad media. La persecución de herejes y quemas de brujas fue un indeseable efecto secundario, pues no todos los integrantes de la sacra congregación estaban al tanto de la verdadera naturaleza de la Armada.


Sin embargo y a pesar de sus esfuerzos, la derrota de Napoleón4 les costo grandes perdidas en hombres y recursos. Exhaustos y con una institución desprestigiada en el tiempo intentaron manejar la reacción que siguió a la derrota napoleónica, pero los nuevos soberanos de la Europa de la Santa Alianza ya no eran tan susceptibles de ser manejados. Unos decenios de oscuridad parecía condenarlos al ostracismo, pues los enanos también habían quedado seriamente reducidos y pareció próximo el fin como hermandad cuando surgieron dos hecho que cambiarían el panorama.


El primero de los hechos fue la revelación del Maestro Girolamus Astrocardius quien tras estudiar el curso de las estrellas durante varios decenios descubrió que en una remota localidad del sur de América, en General Belgrano, se abriría el portal que permitiría resurgir a la Hermandad de la Enana Blanca. Allí imprevistamente se descubrió la existencia de la cruel Orden de los Payasos y secretamente se alentó la guerra entre ambos bandos, lo que en efecto ocurrió. El segundo suceso que cambiaría las cosas fue la accidentada revelación de la Armada Zim, por descuido del Padre Benitus Dalla Scombra el bibliotecario del Vaticano que inadvertidamente en 1868 revelo la existencia de los Archivos Sérvulus (o Masurianos). Una imprudente afirmación en L'Osservattore Romano desmintiendo la importancia de estos archivos solo azuzo el animo de cientos de investigadores que tomaron notas fragmentarias y tejieron algunas conclusiones que finalmente por inverosímiles se tomaron como cuentos de viejas o fabulaciones. Pero el secreto había quedado al descubierto y terceros, como la Sociedad Thule, los Teósofos de Mme Blavatsky y otros intentarían meter mano a estos archivos y secretos. Por ello la Armada negra debió crear la ciencia de la psicología. Porque la Sagrada Congregación para la Doctrina de la Fe, la antigua Santa Inquisición, ya no era una cobertura aceptable. Era necesario, ante el avance descubierto por Girolamus, ofrecer un nuevo frente de batalla. Después del Concilio se determino que la nueva Armada debería integrarse al positivismo científico reinante que promediaba el siglo XIX. Contando con el secreto conocimiento del alma y sus resortes, diseñaron la base de la psicología experimental, guiándola paso a paso hacia el conductismo de Watson y finalmente a la Gestalt. En un alarde de increíble audacia la fuerza de choque de la Armada Zim fueron capturados los enanos y... obligados a realizar terapia de grupo bajo las terribles reglas del Enfoque Gestalt... Nada mejor que el fuego para combatir el fuego. Los conversos de la Hermandad de la Enana Blanca demostraron, pese a ser escasos pues no todos lograban llegar al final del Enfoque Gestaltico en una pieza, ser feroces e implacables para con sus ex camaradas. Y en honor al método hay que aclarar que jamas tuvieron casos de relapsos5; lo que no podría decirse del psicoanálisis freudiano en el cual la gran mayoría deserto y regreso a la antigua y enana camaradería (aunque llenos de traumas psicológicos).


Los Rumpelstinkys, así se denominaron los implacables defensores del orden universal de la Armada Zim, dieron batalla por primera vez en 1893, cuando aprovechando la revuelta cívica de los Radicales contra el Gobierno, y aprovechando que en General Belgrano la policía estaba auto acuartelada, atacaron la sede de la puertita verde. Este breve relato, que transcribimos, pertenece a la colección de El Imparcial, bisemanario fundado en 1905 por Francisco. Marquie. El articulo, publicado en los números 2 y 3, se hallan a resguardo en el Honorable Concejo Deliberante de General Belgrano bajo llave con la colección completa de la publicación que abarca desde 1905 a 1989.

Como recordaran nuestros amables lectores cuando el 1893 nuestro pueblo cumplía su primer año de vida como General Belgrano, después de adquirir su independencia de Las Flores del cual dependíamos bajo la denominación de El Salado, se produjo el segundo alzamiento de la Unión cívica Radical, que en nuestra localidad tuvo una extravagante e inusual nota. (...) Cuenta Don Apolinario D. Bassavilbasso que el día amaneció como es usual en otoño totalmente grisáceo. Una calma lúgubre se extendía pues los trenes de las seis de la mañana y siguientes no circulaban. En esa neblina fría un grupo de ciudadanos acudieron a la comisaria local. La policía se hallaba acuartelada y la población desprotegida (...) El telégrafo había dado la novedad de la revolución en toda la provincia (...) El activo comité local había despachado varias partidas armadas, pero la mas extraña de las situaciones se vivió cuando un grupo de enanos de un circo, sin duda de la compañía de Gabino Ezeiza (Celebre del s. XIX payador de tendencia radical, N. del E.) que se hallaba en ese momento en la localidad. Sin mediar palabra los enanos del circo criollo se trenzaron en una feroz disputa a tiros de revolvers (...) La gresca adquirió proporciones alarmantes cuando una banda de payasos se sumo, gente sin duda adscrita al bando de los mitristas y que desde esos días los llaman “payasos”, aunque hay quienes sostienen que en realidad eran partidarios de Juarez Celman disfrazados. Esta teoría no es compartida por los radicales que aseveran que para payasos, a Celman le sobran ministros. Los vecinos contabilizaron mas de cuarenta disparos, los que dieron en el frente de las casas de los vecinos Tabossi y Martin, afortunadamente sin mas víctima que un farol de queroseno que resulto interesado en su deposito, lo cual es una pena porque hacia poco que el municipio lo coloco cuando se voto el crédito para la iluminación del pueblo (...) Tales pasiones políticas dejaron alterado en grado sumo al vecindario, dando gracias que nadie de la localidad saliera herido; tampoco se registraron víctimas fatales entre los beligerantes enanos y payasos, pues no se hallo a ninguno herido o muerto (...) en realidad no se vio a ninguno de ellos mas en toda la larga temporada que siguió a la caída de dicha y aciaga revuelta” (El Imparcial, número 2 pag. 7 y sgte, número 3 pag. 11, febrero-marzo de 1905)


Mas adelante, en el número siguiente del bisemanario local, una enérgica nota del comité local de la Unión Cívica Radical desmiente que en dicha gresca hubieran intervenido alguno de sus miembros y que la manifiesta animosidad de Marquie era debido su condición de conservador empedernido.


Obviamente jamas se hallaron cuerpos, los Payasos los arrearon a la puertita verde y los Rumpelstinkys, por su parte, se llevaron a casi un tercio de los integrantes de la Hermandad de la Enana Blanca, de los cuales apenas sobrevivieron media docena y se convirtieron en adeptos.


1La metodologia propia del Gestalt propone cambiar los “porque” por “como”

2Los rusos, desplazados del frente balcánico, atacaron en Prusia oriental. Frente a Varsovia, los ejércitos ruso y alemán estaban mutuamente contenidos en las posiciones resultantes del segundo ataque de Hindemburg de diciembre de 1914. Pero nuevos contingentes rusos atacaron bastante más al norte, en la región de los Lagos Masurianos (o Masurios), en un territorio especialmente dificultoso para el desplamiento militar; una zona cercana al campo de batalla de Tannenberg donde alemanes y rusos habían establecido sus posiciones luego de esa batalla. Los rusos avanzaron por ambos lados de los Lagos, procurando desalojar a los alemanes de las posiciones que ocupaban detrás de ellos. Sin embargo, a principios de febrero Hindenburg efectuó un violento contraataque, comenzado con una nueva amenaza sobre Varsovia. Las pérdidas de vidas fueron enormes. Pero pronto se hizo visible que la amenaza sobre Varsovia era una cortina, mediante la cual los alemanes trasladaron rapidamente numerosas fuerzas hacia los Lagos, poniendo a los rusos en riesgo de sufrir otra derrota similar a la de Tannenberg. A mediados de febrero, las fuerzas alemanas habían expulsado a los rusos de Prusia oriental, y avanzaban firmemente después de haber atravesado en varios puntos la frontera rusa. Los rusos debían replegarse dentro de su propio territorio, tras los ríos Niemen y Narew.

3“Hitler no era cristiano y la mayoría de los miembros de su movimiento era explícitamente anticristiana. Por supuesto, a veces Hitler adoptaba una actitud engañosa. Nunca abandonó oficialmente la Iglesia; a veces se refería a la "Providencia" en sus discursos, y durante los primeros años en el poder asistió varias veces a la Iglesia. En la década de 1920 dijo a Ludendorf que tenía que disimular su odio al catolicismo porque necesitaba el voto de los católicos bávaros tanto como el de los protestantes prusianos -"el resto puede llegar más tarde"-. Su programa partidario era intencionadamente ambiguo: "Reclamamos libertad para todas las corrientes religiosas del Estado, en la medida en que no constituyan un peligro para el mismo y no militen contra las costumbres y la moral de la raza alemana". Estos cuidadosos condicionamientos hubieran debido bastar para poner sobre aviso a un cristiano inteligente. Sin embargo, persistió la creencia, sobre todo entre los protestantes, de que Hitler era un hombre muy piadoso. Aceptaban sus seguridades tranquilizadoras cuando se desasociaba, o desasociaba al movimiento si le convenía, de los escritos de sus hombres; por ejemplo, destacó que el folleto anticristiano de Rosenberg titulado "El mito del siglo XX", incluido en el Índex por los católicos, era una posición personal y no la política oficial del partido. En realidad, odiaba al cristianismo y demostró un justificado desprecio por sus fieles alemanes” Paul Jonhson, Historiador Británico.

4El siglo XIX se inicia con las victorias de Napoleón quien corona a su hermano José en el trono de España. En diciembre de 1808 decreta la extinción del Tribunal de la Inquisición. Las cortes españolas que se oponen militarmente a Napoleón dictan una constitución liberal y en 1813 decretan la abolición de la Inquisición. En 1814, derrotado Napoleón y vuelto al trono el rey Frenado VII, restablece el Tribunal.

5(Del lat. relapsus, part. pas. de relabi, volver a caer). 1. adj. Que reincide en un pecado del que ya había hecho penitencia, o en una herejía de la que había abjurado. U. t. c. s.

domingo, abril 10, 2005

El viejo Wittgestein

No es usual leer a los filósofos, y menos aún a los simbolistas. Haceun tiempo en otropost lo cité, ahora aquí más refexiones del Ludwing que se pelo las babuchas para que un monten de pelafustanes sean un poco menos gaznápiros.

Para una respuesta que no se puede expresar, la pregunta tampoco puede expresarse. No hay enigma si se puede plantear una cuestión también se puede responder. El escepticismo no es irrefutable, sino claramente sin sentido si pretende dudar allí donde no se puede plantear una pregunta. Pues la duda solo puede existir cuando hay una pregunta; una pregunta solo cuando hay una respuesta y esta cuando solo se puede decir algo.

Nosotros sentimos que incluso si todas las cuestiones posibles pudieran responderse, el problemano habría sido más desentrañado. Desde luego que no quedaría ya ninguna pregunta y precisamente esta es la respuesta.

De lo que no se puede hablar, mejor es callarse.

martes, abril 05, 2005

Mi versión de "El Cuervo" de Poe

Una vez, al filo de una ominosa noche,

mientras débil y cansado, en tristes reflexiones sumergido,

inclinado sobre un viejo y raro libro de olvidadas ciencias,

cabeceando, casi dormido, oí de súbito un leve golpe,

como si suavemente tocaran, tocaran a la puerta de mi cuarto.

"Es -dije musitando- un visitante tocando leve

a la puerta de mi cuarto. Eso es todo, y nada más."


¡Ah! Aquel lúcido recuerdo de un gélido diciembre;

espectros de brasas moribundas reflejadas en el suelo;

angustia del deseo del nuevo día;

en vano encareciendo a mis libros

que diesen tregua a mi dolor.

Dolor por la pérdida de Leonora, la única,

radiante, Leonora por los ángeles llamada.


Aquí ya sin nombre, para siempre.

Y el crujir triste, vago, escalofriante

de la seda de las cortinas rojas

llenábame de fantásticos terrores

jamás antes sentidos. Y ahora aquí, en pie,

acallando el latido de mi corazón,

vuelvo a repetir:

"Es un visitante a la puerta de mi cuarto

queriendo entrar. Algún visitante

que a deshora a mi cuarto quiere entrar.

Eso es todo, y nada más."


Ahora, mi ánimo cobraba bríos,

y ya sin titubeos:

"Señor -dije- o señora, en verdad vuestro perdón

imploro, mas el caso es que, adormilado

cuando vinisteis a tocar levemente,

tan leve vinisteis a llamar,

a llamar a la puerta de mi cuarto,

que apenas pude creer que os oía."

Y entonces abrí de par en par la puerta:

Oscuridad, y nada más.


Escrutando hondo en aquella negrura

permanecí largo rato, atónito, temeroso,

dudando, soñando sueños que ningún mortal

se haya atrevido jamás a soñar.

Mas en el silencio insondable la quietud callaba,

y la única palabra ahí proferida

era el balbuceo de un nombre: "¿Leonora?"

Lo pronuncié en un susurro, y el eco

lo devolvió en un murmullo: "¡Leonora!"

Apenas esto fue, y nada más.


Vuelto a mi cuarto, mi alma toda,

toda mi alma abrasándose dentro de mí,

no tardé en oír de nuevo tocar con mayor fuerza.

"Ciertamente -me dije-, ciertamente

algo sucede en la reja de mi ventana.

Dejad, pues, que vea lo que sucede allí,

y así penetrar pueda en el misterio.

Dejad que a mi corazón llegue un momento el silencio,

y así penetrar pueda en el misterio."

¡Es el viento, y nada más!


De un golpe abrí la puerta,

y con suave batir de alas, entró

un majestuoso cuervo

de los viejos días idos.

Sin asomos de reverencia,

ni un instante quedo;

y con aires de gran señor o de gran dama

fue a posarse en el busto de Palas,

sobre el dintel de mi puerta.

Posado, inmóvil, y nada más.


Entonces, este pájaro de ébano

cambió mis tristes fantasías en una sonrisa

con el grave y severo decoro

del aspecto de que se revestía.

"Aun con tu cresta cercenada y mocha -le dije-.

no serás un cobarde.

hórrido cuervo vetusto y amenazador.

Evadido de la ribera nocturna.

¡Dime cuál es tu nombre en la ribera de la Noche Plutónica!"

Y el Cuervo dijo: "Nunca jamás."


Cuánto me asombró que pájaro tan desgarbado

pudiera hablar tan claramente;

aunque poco significaba su respuesta.

Poco pertinente era. Pues no podemos

sino concordar en que ningún ser humano

ha sido antes bendecido con la visión de un pájaro

posado sobre el dintel de su puerta,

pájaro o bestia, posado en el busto esculpido

de Palas en el dintel de su puerta

con semejante nombre: "Nunca jamás."


Mas el Cuervo, posado solitario en el sereno busto.

las palabras pronunció, como virtiendo

su alma sólo en esas palabras.

Nada más dijo entonces;

no movió ni una pluma.

Y entonces yo me dije, apenas murmurando:

"Otros amigos se han ido antes;

mañana él también me dejará,

como me abandonaron mis esperanzas."

Y entonces dijo el pájaro: "Nunca jamás."


Sobrecogido al romper el silencio

tan idóneas palabras,

"sin duda -pensé-, sin duda lo que dice

es todo lo que sabe, su solo repertorio, aprendido

de un amo infortunado a quien desastre impío

persiguió, acosó sin dar tregua

hasta que su cantinela sólo tuvo un sentido,

hasta que las endechas de su esperanza

llevaron sólo esa carga melancólica

de "Nunca, nunca jamás."


Mas el Cuervo arrancó todavía

de mis tristes fantasías una sonrisa;

acerqué un mullido asiento

frente al pájaro, el busto y la puerta;

y entonces, hundiéndome en el terciopelo,

empecé a enlazar una fantasía con otra,

pensando en lo que este ominoso pájaro de antaño,

lo que este torvo, desgarbado, hórrido,

flaco y ominoso pájaro de antaño

quería decir granzando: "Nunca jamás,"


En esto cavilaba, sentado, sin pronunciar palabra,

frente al ave cuyos ojos, como-tizones encendidos,

quemaban hasta el fondo de mi pecho.

Esto y más, sentado, adivinaba,

con la cabeza reclinada

en el aterciopelado forro del cojín

acariciado por la luz de la lámpara;

en el forro de terciopelo violeta

acariciado por la luz de la lámpara

¡que ella no oprimiría, ¡ay!, nunca jamás!

Entonces me pareció que el aire

se tornaba más denso, perfumado

por invisible incensario mecido por serafines

cuyas pisadas tintineaban en el piso alfombrado.

"¡Miserable -dije-, tu Dios te ha concedido,

por estos ángeles te ha otorgado una tregua,

tregua de nepente de tus recuerdos de Leonora!

¡Apura, oh, apura este dulce nepente

y olvida a tu ausente Leonora!"

Y el Cuervo dijo: "Nunca jamás."


"¡Profeta! exclamé-, ¡cosa diabolica!

¡Profeta, sí, seas pájaro o demonio

enviado por el Tentador, o arrojado

por la tempestad a este refugio desolado e impávido,

a esta desértica tierra encantada,

a este hogar hechizado por el horror!

Profeta, dime, en verdad te lo imploro,

¿hay, dime, hay bálsamo en Galaad?

¡Dime, dime, te imploro!"

Y el cuervo dijo: "Nunca jamás."


"¡Profeta! exclamé-, ¡cosa diabólica!

¡Profeta, sí, seas pájaro o demonio!

¡Por ese cielo que se curva sobre nuestras cabezas,

ese Dios que adoramos tú y yo,

dile a esta alma abrumada de penas si en el remoto Edén

tendrá en sus brazos a una santa doncella

llamada por los ángeles Leonora,

tendrá en sus brazos a una rara y radiante virgen

llamada por los ángeles Leonora!"

Y el cuervo dijo: "Nunca jamás."


"¡Sea esa palabra nuestra señal de partida

pájaro o espíritu maligno! -le grité presuntuoso.

¡Vuelve a la tempestad, a la ribera de la Noche Plutónica.

No dejes pluma negra alguna, prenda de la mentira

que profirió tu espíritu!

Deja mi soledad intacta.

Abandona el busto del dintel de mi puerta.

Aparta tu pico de mi corazón

y tu figura del dintel de mi puerta”.

Y el Cuervo dijo: “Nunca jamás."


Y el Cuervo nunca emprendió el vuelo.

Aún sigue posado, aún sigue posado

en el pálido busto de Palas.

en el dintel de la puerta de mi cuarto.

Y sus ojos tienen la apariencia

de los de un demonio que está soñando.

Y la luz de la lámpara que sobre él se derrama

tiende en el suelo su sombra. Y mi alma,

del fondo de esa sombra que flota sobre el suelo,

no podrá liberarse. ¡Nunca jamás!